La estrella mexicana Saúl «Canelo» Álvarez derrotó por decisión mayoritaria al kazajo Gennady Golovkin y le arrebató los campeonatos mundiales del peso mediano versiones AMB, CMB e IBO. El combate fue realizado en el T-Mobile Arena de Las Vegas, Nevada.
En el inicio de la pelea ambos boxeadores salieron muy cautelosos a estudiarse mutuamente aunque se conectaron algunos golpes. A medida que transcurrían los asaltos, se calentaban las acciones, tanto Canelo como GGG se veían en óptimas condiciones físicas y superando las expectativas respecto a su primer choque.
En los asaltos medios los dos púgiles estaban dando todo de si, Golovkin insisitiendo con su jab de izquierda y Canelo con sus uppers en corto, complicándole el trabajo a los jueces con asaltos sumamente cerrados. A la altura del octavo ya se notaba el desgaste en ambos, Golovkin con el pómulo izquierdo herido y Álvarez sangrando por la ceja izquierda. El noveno fue otro round muy parejo con grandes intercambios en el centro del ring. En el décimo GGG conectó bien a Canelo pero el mexicano mostró su buena defensa esquivando muchos de los golpes que quiso seguir tirando el kazajo. El insistente jab de Gennady hizo su trabajo poniendo a sangrar por la nariz al boxeador mexicano.
Los asaltos de campeonato fueron intensos y de mucha acción ya que ambos sabían que el combate estaba para cualquiera. En el último round salieron con todo, los upper en corto que le conectaba Saúl a GGG hicieron su efecto y ahora fue el kazajo el que sangraba. Sonó el campanazo final con la sensación de que había sido un encuentro de muy alto nivel y muy parejo.
Los jueces votaron: 114-114 (Glenn Feldman), 115-113 (Dave Moretti) a Canelo y 115-113 (Steve Weisfeld) a Canelo para decretarse al ganador por decisión mayoritaria, Saúl «Canelo» Álvarez.
En la entrevista posterior al combate, Canelo dijo que si los fanáticos quería una tercera pelea, él estaba dispuesto a hacerla pero que ahora tomaría un tiempo de descanso luego de un intenso campamento.
Los comentaristas de Lo Mejor del Boxeo, Juan Carlos Tapia Jr. y Óscar Ramos, ambos anotaron la pelea empate 114-114.
Algunas voces de la prensa especializada en boxeo vieron ganar a GGG y tildaron el fallo de polémico.