He disfrutado “un paseo entre las cuerdas”.

Por: Daniel Alonso, LMB

De manos de su propio autor, Enrique Soria Martín, recibí en Puerto Rico un
ejemplar de “Un paseo entre las cuerdas”, obra que en 424 páginas describe
pormenorizadamente el surgimiento del boxeo en España.

Ese mismo día empecé a leerlo, y si he demorado un poco en terminar su
lectura, es porque me resultó tan interesante que no quería terminarlo. ¿Les
ha pasado?

Yo pensaba que conocía algo del boxeo español, pero esta obra de Enrique
Soria me ha demostrado que estaba muy lejos. Por ejemplo, he conocido
todo el camino que recorrió Baltazar Sangchili para llegar a la conquista de la
corona mundial gallo a manos de mi compatriota Panamá Al Brown. De
hecho, conocí que Sangchili es un apodo de Baltazar Belenguer Hervás, un
mote que asumió porque más o menos así sonaba el nombre de un chino
amigo suyo de la infancia. Sorprendente.

La obra es el primer capítulo de un trabajo enciclopédico cumplido por
Enrique, junto a Queto Calvo Serrano, y que pretende plasmar en blanco y
negro la historia completa del pugilismo español. Este libro, que acabo de
leer, llega hasta 1939, lo que me hace suponer que el siguiente tomo
arrancará desde 1940.

Lo simpático es que mezcla, el tema boxístico con la historia universal. O sea,
te describe lo que pasaba en el boxeo español junto a los principales
episodios de la historia universal. Por eso me encantó que, en 1914, se
hablara de la inauguración del Canal de Panamá.

Podría decir muchísimas cosas, pero prefiero compartirles aspectos que
desconocía, y que aprendí degustando esta exquisita obra, bien hecha,
profundamente investigada y magistralmente producida.

Por ejemplo, que fue en Bilbao donde se celebró la primera velada de boxeo
profesional en territorio español y que en los Juegos Olímpicos de Estocolmo,
el boxeo quedó fuera debido a que en Suecia estaba prohibido.

Ciertamente Barcelona, cuyo emplazamiento cerca de la frontera con Francia
favorece su mayor contacto con la realidad europea, es el epicentro del
movimiento boxístico en España y que hasta el rey Jorge V asistía en Londres
a los matchs de boxeo.

En 1916 llega Jack Johnson a España donde hizo buenas migas con el gran
Joselito y se aficionó a la tauromaquia. Y hablando de pesos pesados, la
victoria de Paulino Uzcudum sobre el italiano Emilio Spalla por la corona
europea de los pesos pesados, supone un antes y un después en el boxeo
español. (Martes 18 de mayo de 1926)

Gregorio Vidal, quien disputó el título mundial gallo vacante con Panamá Al
Brown era de origen mallorquin, llamaba la atención por su puesta en escena
y valentía. Pincho Gutiérrez, el apoderado de Kid Chocolate, decía que Vidal
era en esa época el mejor boxeador español en Estados Unidos.

El 18 de junio de 1929 llega la oportunidad soñada para Vidal, quien se
convierte en el primer español en disputar un título del mundo. Soria hace un
formidable relato de la pelea contra el panameño Brown, advirtiendo con
tino que Kid Chocolate y Fidel La Barba habían sido escogidos para pelear por
el título, pero estaban pasados del límite de la categoría. Vidal fue el primer
español en pelear por un campeonato del mundo. Logró prestigio y fortuna.
Los gringos le llamaban Vidal Gregory. Tras su retiro se quedaría a vivir en
San Francisco, donde trabajo como cocinero, falleciendo a la edad de 85
años.

Un curioso hecho se dio el miércoles 11 de febrero de 1931 en la Salle Pleyel
de París, Panamá Al Brown le gana por puntos a Nic Bensa en pelea de
revancha. “La gala resulta un fracaso económico que genera pérdidas en
torno a los 100 mil francos, días después el empresario de la sala se
suicidaba al no poder hacerle frente a los pagos de los púgiles”.

El 25 de marzo de 1931 es una gran fecha para el boxeo español. Victor
Ferrand ante Frankie Genaro es el primer campeonato del mundo que se
celebra en España. (Fue en la Plaza Monumental de Barcelona. Resultado
empate)

El 12 de abril de 1931 dos españoles pelean en Panamá. Martin Oroz y
Serafin Martinez Fort derrotan por nocaut a Young Joe Walcott y Young
George Dixon. Supongo que fueron los primeros españoles en combatir en
suelo panameño. Tremendo dato.

Del boxeo de mi país supe un hecho curioso en insólito: “La detención en su
país del púgil panameño Rafael Hurtado por fingir un KO frente a Manuel
Herrera en la disputa del título nacional del peso pluma. (1934).

Podría decir muchas cosas más. Pero por ahora, lo que siento es un inmenso
deseo de tener en mis manos el próximo tomo de esta formidable obra.
Gracias Enrique Soria Martin, por haberme abierto las puertas de la historia
del pugilismo español.